Espero que me entendiérais, por qué el post anterior (comprenderlo bien) era llegar a la utopía necesaria para poder llegar al conocimiento. Para mí era una lección de vida, sobre todo si uno quiere ser profesor de dibujo.
De vez en cuando en la vida se pasa de una axonométrica a un diédrico, y hay que saber ver bien los invariantes, para poder manejarte bien en la nueva realidad. Mirad, durante dos años estuve viviendo en Toronto. Calabazo Mayor del Reino en verdad se llama Nacho Muñoz Pascual . En Toronto esa Ñ se complicaba tanto que directamente me la transformaban en N. Bueno, así ni yo mismo sabía pronunciar mi nuevo apellido. Y el nombre tan bonito que tengo, Nacho, allí se convertía en poco más que una patata. Se me encendió una lucecita y dije: ¿qué tal si te pasas al Ignacio? Mala idea, en Toronto Ignacio suena como aquí Arsenio, a nombre realmente antiguo, con el que no te vas a comer más que un rosco. Allí mi nombre artístico de Nacho Paswal era la risa, pues Nacho era el nombre que les ponían a los chihuahuas, Mocaqua (mi otro nombre artísticos) era impronunciable, Ignatius me llevaba dos siglos atrás... Por suerte el fuego me acompañó por Toronto y la palabra Iggy solucionó lo de mi nombre. ¿Y el apellido? ¿Cómo pronunciaría aquel Munoz para que al menos se quedara en Munoz pronunciado, para que no me quitaran también la U?
Por suerte a mi niño interior se le encendió una lucecita en la noche y salí yo en el diédrico de Toronto. Ahí estaba yo, siendo yo mismo, con un nombre que me volvía a representar tal y como era, aunque ahora sin Ñ. Daba igual, es lo mismo tener la luna encima de la N que llevarla en otra parte de tu apellido.
Iggy Mun-Oz, Iggy MoonOz!!!
El primer dibujo del narrador del libro de Saint-Exupéry representaba a una serpiente boa digiriendo un elefante. Pero todos los adultos, en cambio, veían otra cosa: un simple sombrero. Esto le hizo abandonar su pasión por los pinceles, hasta que se encuentra con el Principito que, inmediatamente, se da cuenta de que se trata de un elefante dentro de una boa.
("Pero siempre me contestaba: 'Es un sombrero'. Entonces no le hablaba de serpientes boas, ni de selvas vírgenes, ni de estrellas. Me ponía a su altura. Le hablaba de bridge, de golf, de política y de corbatas. Y la persona mayor quedaba encantada de conocer a un hombre tan razonable".)
Cuando has visto esto de los invariantes, cuando has visto que todo encaja, has visto el elefante dentro de la boa. Si no, sigues viendo el sombrero. Sigues pensando que el dibujo técnico es aprender doscientas mil construcciones de memoria, como si fuera un libro de cocina. Y se te quitan hasta las ganas de pintar.
Hay que reconciliarse con la creatividad que teníamos de niños, que era capaz de ver el cordero dentro de una caja. No hace falta aprenderse doscientas mil construcciones de corderos. Con tener la capacidad de ver lo que se cumple (que esa caja es una habitación perfecta para tu cordero perfecto) ya basta. Si no hubiera planos para construir las casas, ¿nos iban a haber salido con tanta perfección? Imaginaos, construir un complejo residencial al tuntún, igual de complicado que pintar el cordero perfecto. Pero si somos capaces de ver los invariantes y los vamos llevando del plano a la realidad poquito a poco, ocurrirá al final que el complejo residencial va apareciendo de repente y las distintas casas acaban teniendo las habitaciones donde podremos vivir (sin planos quizás alguna se quedaría como el rosario de la aurora, sin armario, sin ventana...).
Y cuando el principito (éste ya sin mayúscula) se fue a Canadá, a estudiar su carrera militar, ¿cuál sería su invariante? Bueno, cuando te apellidas Borbón todo es más fácil, a él la terna de apellidos con puntos y con rectas seguro que se le conservaba sin ningún factor.
“Todo niño es un artista, lo difícil es seguir siendo artista cuando uno crece.”
ResponderEliminarPablo Picasso
“Lo más importante es conmoverse, amar, tener esperanza, estremecerse, vivir.”
Auguste Rodin
“Un ojo ve, el otro siente.”
Paul Klee
"But Mathematics is the sister, as well as the servant, of the arts, and is touched by the same madness and genius."
ResponderEliminar-Marston Morse-